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Mostrando entradas de 2016

Arriesgarse.

Todos seríamos capaces de dejar cosas por algo que creemos que merece la pena. Dejaríamos de bailar bajo la lluvia para dar ese dulce beso a la persona con la que compartimos tal momento. Dejaríamos una obligación por algo propuesto. Seguramente también dejaríamos atrás el dolor pasado por llenarnos de nuevas esperanzas e ilusiones.  Dejaríamos en la almohada todos los lastres de nuestra mente para obtener cuerdas que tiren de nosotros.  Expiraríamos en tan solo unos segundos todo lo que llevamos dentro y en otros pocos segundos rebosaríamos nuestros pulmones de aire fresco y nuevo. Quizá incluso dejaríamos ese "No me importa" para dar paso a un "Me importa. Me importas". Pero es más fácil aferrarse a la comodidad de lo que ya tenemos y no aferrarse a todo lo que podríamos tener solo con cambiar nuestro miedo a perder.

Y ahora pregúntate, ¿qué tipo de persona eres? ¿Qué tipo de persona quieres ser?

No existen las personas marcadas por un pasado trágico, existen las personas que no son capaces de superar.  No existen las personas a las que les gusta tener cierta libertad, existen las personas que no se atreven a compartir.  No existen las personas que ya no creen en el amor, existen las personas que basan todo en el amor, de una manera u otra. En esta vida no existen motivos por los cuales no quieras arriesgarte a tener todo y perderlo, existen las excusas. En esta vida hay dos tipos de personas: las que quieren y las que no, y querer es poder. Si no quieres y te va bien la táctica de echar un polvo a las seis de la mañana con una chica de la que ni recordarás, ya no solo su nombre, sino cómo iba vestida, adelánte, si tras doce horas te sigues sintiendo como el mismo tio duro de la noche anterior, claramente no quieres querer, te va lo simple y lo que nunca durará más de medio día. Si por el contrario eres de querer, de los que tras echar el mejor polvo de tu vida luchas ...

Que vengan y que se vayan cuando deban.

Piensas que nunca va a cesar, esa decepción, esa angustia, esa culpa cuando sin embargo sabes que has pedido perdón por lo que debías, has aprendido de tus errores y has hecho lo correcto en cada momento.  Pero entonces te aclaras, y entiendes que hay personas que forman parte de tu vida por un tiempo, pero no para siempre. Cuando porfin las echas de tu vida es cuando realmente vives, disfrutas y conoces a gente que realmente merece la pena. La gente tiene que venir y se tiene que ir y si no se va, echala. 

Mil caminos, tú eliges cuál.

Ella llora. Llora desconsoladamente. Se ha dado cuenta. Cuenta de algo que no quería. Quería pensar que no se había involucrado. Involucrado sentimentalmente. Sentimentalmente lo había hecho.  No sabía parar y quería hacerlo, pero no se había dado cuenta de que no solo había un opción, sino miles. Pero adecuadas a su caso y situación había dos. Estaba la que ella veía como única; olvidarlo, olvidar aquel amor de verano que le devolvió la luz arrancada en el invierno anterior, pero por otro lado, también había otra, más difícil; conquistarle, conquistarle como él lo había hecho sin ella pretenderlo ni quererlo. Estaba decidida, había entendido que en la vida nunca hay solo un camino. Y ella decidió el suyo.

Vacío.

Y le volvió a pasar. Abrió cada rincón de su alma sobreponiéndolo en un lecho de confianza infinita. Pero al parecer fue demasiado peso para ese fino lecho, por lo que todo cayó a un vacío también infinito. Una caída constante, sin nada que parase a esa confianza ahora débil y quebradiza, y a ese tierno y dulce rincón asustado. Asustado por el hecho de que, por segunda vez, entendió que no podía posarse sobre la confianza, puesto que una vez que se rompe, nada sería lo mismo.

Necesitas distancia.

Estas obcecada, en que tras cada tronco, cada paso que avanzas a gran velocidad por ese bosque oscuro y vacío, hay un precipicio. El cual significa el fin de algo, de ese bosque, de tu bosque.  Necesitas tener mejor visión para poder meditar sobre ese obcecado precipicio, por ello decides poner distancia entre tus pies y la tierra que les rodea, esa es la razón de subir a lo más alto de uno de esos troncos de los que huyes; y lo ves claro, tan claro como cada pájaro que sobrevuela el cielo azul.  No hay ningún precipicio. Y entonces pasa, pasa que lo entiendes todo, entiendes porqué buscabas ese precipicio como una desesperada por un trozo de pan, y es que no soportabas el hecho de estar sola sobre ese oscuro bosque, tan inocente y tan agresivo para ti. Lo mismo pasa con la vida, a veces necesitas poner tierra de por medio para poder comprender que es lo que ocurre a tu alrededor y ver una solución adecuada. Muchas veces nos convencemos de algo sin siquiera habernos molestado ...

Elígele, pero elígele para haceros felices el uno al otro.

Te acostumbras a levantarte al lado de alguien, a que te despierte con caricias, a que te mire la cara sin lavar y aun así la observe con admiración, a que te de besos sin venir a cuento y cada uno de ellos sea con más sentimientos que el anterior, también a que vivas en una risa constante, y bueno, quizá también al hecho de saber que esa persona está a tu lado.  Cuando te quitan todo eso sabes que cada día que pase te acostumbrarás a no tenerlo. Y no es que te de miedo saber que ya no necesitarás dormirte al lado de alguien o besarle las veinticuatro horas del día, sino que no quieres acostumbrarte, porque eras tan feliz cuando lo tenías que no quieres que se acabe. Todas las personas tenemos la suerte de encontrar, a lo largo de nuestra vida, una persona que nos complemente a la perfección. Esa persona es la que te hace reir cada día y también llorar algunos, que te da besos como si cada uno de ellos fuese el último, que valora el tiempo que le dedicas, que tiene tus mismos valor...

Lo que queremos en común todos los estudiantes.

Comprensión. Eso es lo que buscamos. Que cuando lleguemos a casa malhumorados tras un día interminable de clases haya alguien ahí que nos comprenda, que sepa que la vida de un trabajador es dura, intensa y agobiante, pero que la de un estudiante también. Algunas personas no saben o no recuerdan lo que es tener que levantarse cuando aún es de noche, tras una madrugada de desvelos por nervios debido a un examen, una presentación... sentir las sábanas pegadas a tu cuerpo susurrándote al oído que lo que necesitas son unas vacaciones de una hora, media hora, o cinco minutos más descansando, mientras que tú conciencia te dice que te levantes de la cama y sigas persiguiendo tus metas. No solo seguir persiguiendo tus metas, sino complacer a tus padres. No soy de esas personas que piensan que hay que estudiar para complacer a los padres, no me refiero a eso, me refiero a que todos sabemos que no hay mayor satisfacción que la de un padre o una madre viendo como sus esfuerzos plantando semillas ...

Querer y no poder, ¿te suena?

Y ella quería saber qué le sucedía. ¿Porqué no podía?, ¿porqué quería pero no podía? Se repetía constantemente esas dos preguntas a lo largo del día, pero ni si quiera intentando buscar las respuestas adecuadas las encontraba. Sabía que querer era poder, pero para ella no funcionaba así. Ella quería aguantar al menos veinte segundos mirándole a los ojos y no duraba ni tres. Ella quería cogerle la mano e incluso se lo imaginaba, pero le temblaba el pulso, demasiado como para hacerlo. Ella quería apoyar su cabeza en su hombro, pero el pensamiento de que podía no ser recíproco le hacía pensárselo más de una vez. Y así vivía ella, cohibida, ruborizada y abrumada ante el hecho de que era incapaz de abrirse, y más sin saber el porqué. Nadie sabía qué le ocurría y la tomaban por una chica fría y distante, pero nadie sabía que ella, en el fondo de todas las telas cosidas una y otra vez junto con su caparazón en armas, ella, era creyente. Pero no creyente en un dios o en algo parecido, ...

Lo que nos inculca la sociedad actual de la belleza.

http://www.divinity.es/blogs/oteradas/Sex-symbols-bellezones-descuidado-fisico_6_2155215009.html ¿"Se echaron a perder"?  ¿Pero en qué mundo vivimos? Ya no hay ni una sola prensa de moda, belleza, etc, que no le de importancia a la belleza exterior.  Si Alicia Silverstone, Britney Spears, Cameron Diaz, Cindy Crawford, Drew Barrymore, Eva Longoria, y un sin fin más de famosas tienen celulitis, ya son tachadas de la lista de sexys, pibones y de las mujeres más guapas del mundo de las celebridades. Todas estas prensas son hipócritas, ya que: 1. Si sale un caso de anorexia, intentan persuadir a las mujeres que tienen esta enfermedad con frases tipo "la belleza interior es más importante que la exterior", "los hombres se enamoran de la manera de ser de la mujer", "es más atractiva una mujer con curvas que delgada"... Pero luego nos encontramos con publicaciones como esta. 2. Publican estadísticas sobre lo que prefieren los hombres refiriéndose al cuer...

Lo cotidiano en una discoteca.

Y me pregunto, ¿en qué momento cambió? ¿En qué momento dejó de ser lo maravilloso que era antes? Por desgracia no pude vivir esos momentos, esos en los que ibas a una discoteca o a una fiesta para estar con tus amigos y poder disfrutar de unos bailes y unas risas, pero con la finalidad de divertirse. Los chicos sacaban sus prendas favoritas para deslumbrar en la pista de baile, para demostrar su pasión por divertirse. Las chicas sacaban el conjunto que más les gustase, se lo ponían e íban corriendo como niñas para bailar, bailar como si fuese la primera y la última vez. Ahora todo ha cambiado. Los chicos solo buscan una prenda que marque los músculos, que se vea bien, se repeinan y por el camino hacia la discoteca hablan de chicas, de si van a "pillar" con una o con otra, de si una esta "buena" o no lo esta. Las chicas sacan su prenda más provocadora, se maquillan como si al día siguiente no fueran a encontrar más maquillaje y mientras caminan hacia la discoteca, el...

Atención, pasajeros del tren.

Si lo pensamos, ahora mismo podrían estar pasando mil cosas diferentes, sin tener nada que ver la una con la otra, sí, mientras lees estas líneas. Una persona saliendo de un concierto espectacular, o quizá una persona muriéndose en este instante. Eso suena un poco trágico, pero no intento eso, intento poner casos muy diferentes, extremistas, polos opuestos.  Pongamos otro ejemplo más agradable. Como por ejemplo dos personas, caracterizadas por la pasión, por las ganas de vivir experiencias. En este mismo momento se dan su primer beso, una promesa de todo lo que vendrá, obvio es que no todo será de rosa, pero aparte de las cosas no tan agradables, vendrán promesas cumplidas, promesas de amor y promesas de bonitos pasajes. Soy partidaria de eso que dicen de que la vida es como un tren, os explico; al nacer te subes en el tren, y a medida que avanza ganas años, madurez y sabiduría. Personas se bajan, otras se suben, unas se caen y otras se levantan. Unas están tristes, otras felices, ...

Como unas zapatillas de estar por casa.

¿Dónde están esas personas especiales? Pero no digo especiales porque tengan un trabajo importante, unos ingresos generosos o una belleza indescriptible. No, hablo de una persona especial de verdad, de la de toda la vida, de la que es realmente especial. Veréis, creo que me no me estoy explicando correctamente. Una persona especial es esa que se ríe, se ríe de él, de tí, de vosotros, de todo, que sonríe excesivamente. Una persona especial que no le de vergüenza nada, nada como gritar por la calle, nada como hacer el idiota, nada como que te pongas a cantar reggaeton en medio de la Gran Vía, sin importarle los demás. Una persona especial para tí, que le encante que te encante algo. Que tenga pasión por vivir, por crear, por crecer como persona. Que sea como esas sábanas recién usadas en una noche, como unas zapatillas de estar por casa. ¿Cómo unas zapatillas de estar por casa? Sí, como eso. Que se adapta a tu cuerpo, atí, a tus comodidades, que te lleva, que evita que te golpees, que te...

A ti, mi más preciada amiga.

Hoy, 12 de febrero, es el cumpleaños de mi mejor amiga, y qué mejor publicación en este día que hablar sobre la amistad. Veréis, veo muchas chicas, por la calle, por el cine, por discotecas, por los pasillos de clase, en fotos, en películas o series... Y permitanme decirles, con todo el respeto del mundo, que no les envidio, no les envidio sus risas, sus salidas de fiesta, sus días de shopping, sus aventuras, sus días en la playa, sus cotilleos de noviazgos, no envidio nada de eso. Quizá porque ya tengo esa mitad, esa persona que se complementa conmigo, que si yo soy borde ella es dulce, que si yo soy mala con los estudios ella es una empoyona, que si yo no soy de relaciones ella si, que si yo lloro ella ríe. Porque todo se pega, la dulzura, el interés por estudiar, el querer encontrar a un tio adecuado, el querer reir incluso cuando todo está vacío. Porque eso causan, las mejores amigas digo, causan que cambies lo malo, que te vuelvas generosa, que valores todo, que sepas escuchar a l...

¿Qué hay de malo en soñar?

Dejas de centrarte en lo malo, en los problemas y en las desilusiones. Entonces comienzas a ver la vida de otro modo, a mirar las cosas buenas, la gente que sigue ahí, los momentos buenos que al estar fijándote en lo bueno de la vida, se convierten en mejores. La vida es soñar. No entiendo esa gente que dice que no hay que soñar, que hay que hacerlo. Señores, para hacer algo, primero hay que pensarlo y soñarlo, eso hace que lo desees con todas tus fuerzas, y que como consecuencia, lo intentes y lo logres. Yo creo en los sueños, creo en el deseo de las cosas, y permitanme que les diga que funciona.

Para los admiradores de la belleza.

Todo está en su debido lugar, en su debida manera. Las rocas; resbaladizas del verdín por la húmedad y el roce de las olas, están en su posición perfecta. Se encuentran en el lugar adecuado. El mar; tintado de un azul intenso, que al llegar a las rocas en forma de olas se vuelve azul esmeralda, con una espuma densa. Parecen impenetrables. Están en constante movimiento, y sin embargo todo sigue igual. Sigue siendo del mismo tono, de la misma forma y con el mismo aroma. Aroma a relajación, a bienestar y a dulzura. El sol; que a su paso por el cielo cambia su color y al llegar al horizonte se tiñe de un color indescriptible. Se podría comparar con un naranja chillón mezclado con pigmentos amarillos. Pero ni siquiera así sería el color que enseña, ni tampoco el que refleja en su cómplice llamado mar. Y si hablamos de la arena; de esa suave, de un color resplandeciente, virgen y limpia tras estar unos meses sin caminantes y admiradores de la belleza que se describe en estas líneas, si habla...